Llega el momento en que tod@ hortelan@ tiene que planificar su huerta. Y eso han hecho las últimas semanas l@s alumn@s de segundo ciclo de primaria. Primero han conocido dos pilares de la agricultura ecológica: las rotaciones en el tiempo de los cultivos y las asociaciones en el espacio. Con estas dos ideas fomentamos la biodiversidad, mantenemos la fertilidad del suelo y aprovechamos las ayudas mútuas que se establecen entre unas plantas y otras.
Primero han clasificado las hortalizas según su parte comestible. Hay que tener en cuenta que para las rotaciones, los frutos también incluyen semillas y flores, todos demandantes de fósforo. Después vendrían las legumbres que fijan nitrógeno al suelo, posteriormente las verduras de hoja que lo consumen y finalmente las raíces, donde también se incluyen bulbos, tallos y tubérculos y que absorben más potasio.

Una vez comprendido este esquema, han conocido la tabla de asociaciones de cultivos, que se basa en 4 principios:
- Combinar plantas con diferentes requerimientos de nutrientes (altos y bajos).
- Asociar hortalizas de diferentes ritmos de crecimiento (rápido y lento).
- Combinar hortalizas de hoja con verduras de raíz.
- Incluir plantas repelentes de plagas y/o atrayentes de insectos beneficiosos.

Entonces ha llegado el momento de medir los bancales. Se han hecho grupos y con reglas han calculado el ancho y el largo. Lo han dibujado en el plano y han calculado cuantas verduras entrarían de dos especies diferentes. Así hemos visto los marcos de plantación que son las distancias entre plantas y entre filas de cada cultivo. Estamos ya en la segunda sesión.
Por último, en la tercera sesión cada grupo ha hecho los semilleros para las hortalizas que había planificado.


Porque no lo olvidemos, ¡Febrero es el mes del semillero y del invernadero!